Notimex, la Agencia de Noticias del Estado Mexicano, cumple este 21 de febrero un año con una huelga instalada por sus trabajadores. Diversos motivos llevaron al paro definitivo de labores reconocido por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) del Gobierno de México, entre ellos la pretensión de abolir el contrato colectivo de trabajo —y con ello las conquistas sindicales— que marcó el inicio de la gestión de la periodista Sanjuana Martínez al frente del organismo.

Sus intenciones no encontraron buena recepción, por lo que comenzó el terrorismo interno. “No podías decir nada porque te corrían, se empezó a crear un sindicato patronal y todos los trabajadores comenzaron a ser amenazados con que si no se afiliaban a ese iban a ser despedidos, lo cual es ilegal”, recuerda Adriana Urrea, Secretaria General del Sindicato Único de Trabajadores de Notimex (SutNotimex), en entrevista con Mexicana de Arte. Adriana fue despedida y enfrentó una campaña de difamación orquestada desde la dirección de la Agencia, lo mismo que quienes formaban parte del Comité Ejecutivo Nacional.

Pero no fueron los únicos: “Cuando llegó Sanjuana Martínez habíamos 328 trabajadores en la Agencia; de marzo de 2019 al 21 de febrero de 2020 que vamos a la huelga, se habían despedido a 245 personas, el 80% de la plantilla laboral”, señala la también periodista.
“Comenzaron los despidos a hacerse mayores, seguían sin respetar el contrato colectivo ni pagar prestaciones”.

A pesar de que la administración encabezada por Martínez decía haber cubierto liquidaciones, la consulta del SutNotimex a la Plataforma Nacional de Transparencia aportaba otros datos: hasta noviembre de 2019 sólo se habían ejercido 18 de los 32 millones de pesos asignados por la Secretaría de Hacienda y Crédito Publico (SHCP) para este rubro en el presupuesto de Notimex.

LA INTENCIÓN DE CONFUNDIR

“Ellos insisten en confundir, en sacar de contexto”, sentencia Urrea.

Eso se confirma al corroborar los comunicados lanzados por la Agencia, donde se acusa, por ejemplo, a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA) de beneficiar al Sindicato. “Designa JFCA perito a modo para favorecer al SutNotimex”, se lee en el encabezado lanzado por Notimex el 3 de febrero, en el que también acusan al gremio de exigir “dispendios y despilfarros que ocurrían en administraciones anteriores como lo es la ayuda de más de 200 mil pesos al mes, licencias sindicales por 364 días al año, la reinstalación de 80 ex trabajadores, así como más de 230 plazas para el SutNotimex” en palabras del director jurídico, Victor Fernández Peña, quien califica como insostenibles para la Agencia las prestaciones del Contrato Colectivo de Trabajo, que benefician a más de 230 trabajadores.

Sin embargo, las faraónicas prestaciones a las que refiere Fernández Peña corresponden a vales de despensa y todas las prestaciones —reconocidas en el presupuesto autorizado por la SHCP— que se aplican a las y los trabajadores de base. “No estamos pidiendo más plazas, estamos pidiendo que, de las plazas que ya están autorizadas en presupuesto, se reconozcan cuáles son las sindicalizadas (establecidas y relacionadas al contrato colectivo de trabajo) y que a esas se les respete dicho contrato para que se les pague a los trabajadores lo que les corresponde”.

El contrato colectivo de trabajo contiene 223 plazas sindicalizadas, enumeradas en su última página. Se beneficia también a todas y todos los trabajadores sindicalizados sin importar si en la empresa hay una o más alianzas gremiales, como es el caso de Notimex gracias al sindicato patronal creado tras la llegada de Sanjuana Martínez a las oficinas de Baja California 200 en la Colonia Roma. A este respecto, incluso los trabajadores de la Agencia que no estén afiliados a ningún sindicato pero que ocupan alguna de esas posiciones son susceptibles de recibir los beneficios establecidos en él.

“Dicen que estamos pidiendo 200 mil pesos mensuales para beneficio sindical. Eso es completamente falso. Ese recurso corresponde a una prestación contemplada en la cláusula 49ª del Contrato Colectivo, que establece que se va a entregar una cantidad al Sindicato, pero para que se distribuya de forma equitativa entre todos los agremiados como apoyo de canasta básica, y ese dinero, para efectos de practicidad, se distribuye a través de vales electrónicos a través de la empresa, nunca pasa por manos del SutNotimex. No es un dinero que estemos pidiendo nosotros de beneficio para el Sindicato”. De acuerdo con la versión más reciente del Contrato Colectivo de Trabajo, Notimex se obliga a aportar en la primera quincena de cada mes la cantidad de 201,602 pesos al SutNotimex para la preparación de canasta de alimentos de primera necesidad, dispersados por la empresa en vales electrónicos según la misma reglamentación, unos 900 pesos por trabajador. “Cuando llegó la directora, unos meses después, simplemente dejaron de pagar esa prestación”, comparte Urrea junto a la denuncia de los bajos salarios en la Agencia. “Hay compañeros que tienen plazas desde 6 mil pesos mensuales”, revela. “Se le quitaron las prestaciones a todas y todos”.

Para desgracia de Notimex, los números de sus comunicados no coinciden con la realidad: Si bien los 364 días de licencias sindicales sí están contemplados en el contrato colectivo de trabajo, estos se reparten entre todos los miembros del Comité Ejecutivo Nacional y deben autorizarse por Notimex, además de que la misma cláusula 75ª establece que no podrán utilizarse por 3 o más funcionarios al mismo tiempo. Tampoco se exige la reinstalación de 80 ex trabajadores, sino de 43 que fueron despedidos de forma irregular —incluidos sus líderes sindicales—. El texto fechado el 3 de febrero dice que las prestaciones del SutNotimex corresponden al 84% del presupuesto de la Agencia, sin embargo estas suman poco más de 140 millones de pesos (mdp) por concepto de Servicios Personales, y una simple regla de tres deja claro que ese monto es, en realidad, el 64.07% de los más de 220 mdp autorizados para la Notimex en 2020, que además se dan por ejercidos en su totalidad en la cuenta pública.

Y LOS PAGOS SIGUEN

Sanjuana Martínez sigue cobrando su sueldo a pesar de que la huelga se lo impide. Así lo reconoce en entrevista con Vicente Serrano para Sin Censura. Esto contraviene la ley, pues su labor no es esencial para la subsistencia de la agencia y ella no es parte de las 12 personas designadas de emergencia para el cuidado, por ejemplo, de la fototeca de la Agencia.

“Notimex tiene una fototeca considerada patrimonio nacional que requiere mantenimiento, pero no se lo han dado nunca. Ella dice que están haciendo actividades sustanciales como ese mantenimiento, pero esta se encuentra en el edificio donde nosotros tenemos uno de los campamentos y sabemos que nunca lo han hecho”, revela. Esto podría comprometer la memoria fotográfica de México por la omisión de Martínez.

El Centro de Documentación (CEDOC) de la Agencia se convirtió en el almanaque de los ataques digitales ordenados desde la dirigencia de Notimex. Así lo revelan quienes formaban parte de esta actividad y que se sumaron a la huelga tras ser convertidos en contadores de los tweets exigidos por Sanjuana Martínez y camaradas en contra del Sindicato y de quienes la criticaran.

“Nos decían: En lugar de estar haciendo actividades del CEDOC, nos ponían a hacer reportes de cuántos tweets hacía cada trabajador todos los días”, comparte Urrea. Otro peligroso movimiento fue migrar toda la información de Notimex a un nuevo dominio, externo a gob.mx, lo que provocó la pérdida del archivo histórico digital de la Agencia. Hoy, el dominio notimex.gob.mx permanece vacío y la única forma de acceder es mediante notimex.mx. Este movimiento, así como el cambio de imagen, se llevó a cabo sin la autorización de la Junta de Gobierno que vigila esta dependencia.

CIBERACOSO Y VIOLENCIA DE GÉNERO

“Creaban muchas cuentas bot para atacar a los trabajadores, decir que éramos corruptos. Sanjuana empezó a pelearse en ese tiempo con sus directivos porque muchos al principio no querían participar de sus ilegalidades, por eso sabemos que a ellos les daba la orden de crear estas campañas”. Ellos mismos, al ser parte del objetivo de los ataques, revelaron que habían recibido la instrucción de atacar a sus colegas.

“Salieron a evidenciar esta situación, revelando que no sólo era contra los trabajadores sino contra periodistas y funcionarios. Es donde suena el nombre Aristegui porque ella estaba en esa lista junto con otras más”. Posterior a esa revelación es que Carmen Aristegui comenzó a dar coberturas sobre el tema. “Se confirmó que lo que decíamos era real, las campañas no han parado”. De eso también dio cuenta el Signalab del ITESO, que publicó el análisis Ataques selectivos: estrategias de desprestigio y descalificación. El caso de experiodistas de Notimex.
Para Urrea, la estrategia fue viralizar información confusa o apoderarse de la conversación a través de mensajes que incluyeran la frase “para la nueva Notimex” con el fin de ocultar las exigencias del gremio.

“Una de nuestras denuncias en la Secretaría de la Función Pública (SFP) contra Sanjuana Martínez es por violencia laboral de género”, revela la líder sindical. Y es que una de las aristas de los ataques en su contra fue la sexual: “Me inventaron vínculos sexuales con todos”.

¿Cómo no considerar los ataques un tema de género, siendo que 8 de cada 10 huelguistas son mujeres, muchas de ellas madres de familia? Existen quejas en la Comisión Nacional de Derechos Humanos ante las agresiones que su condición les representó. “Antes bastaba con avisar que tenías que ausentarte o llegar más tarde porque se enfermó alguno de tus hijos, ahora te descontaban el día, te regresaban a tu casa, no había ese apoyo sobre todo para las mamás”.

“Sanjuana, bajo la bandera de feminismo, ha atacado a las mujeres: Corrió a una mujer un día que tuvo que llevar a la agencia a una de sus hijas porque cerraron la escuela con motivo de la contingencia. Tuvo la mala suerte de encontrarse a Sanjuana en el elevador y, sin más, le notificó su despido; acosó y despidió a una mujer embarazada, lo que es completamente ilegal, porque escribió un tweet diciendo que el nuevo sindicato no la representaba”, expone Urrea.

Al final, la liquidación de esta mujer estuvo condicionada a firmar su renuncia, lo que constituye una violación a la ley en la materia.

GARANTIZAR LA SUPERVIVENCIA

Los sueldos de Notimex, en respuesta a la huelga y con excepción del de Sanjuana Martínez y su equipo, han sido suspendidos.

Ante tal suerte, trabajadores y miembros hoy subsisten gracias al apoyo de otros sindicatos como el SITUAM, el Sindicato de Telefonistas o el STUNAM, entre otros miembros de la Unión Nacional de Trabajadores. Esto, para mantener en pie los 4 campamentos de la huelga.
Algunos agremiados se convirtieron en conductores mediante plataformas de transporte; otros tienen el apoyo constante de sus familias. “Prácticamente nos mantienen”, confiesa Urrea. “Algunos se pusieron a vender cosas, otros tomaron trabajos temporales. Hay compañeros que han encontrado situaciones muy complejas porque deben sostener a sus familias”. Esta condición se agrava ante la solicitud de exclusión emitida por Sanjuana Martínez.

Urrea considera que Sanjuana Martínez hace mal uso del nombre del Presidente Andrés Manuel López Obrador al hacer solicitudes a título suyo. De acuerdo con documentos a los que Mexicana de Arte tuvo acceso, Por instrucciones del Presidente es la leyenda que ha encabezado diversas misivas firmadas por la titular de Notimex. Las peticiones van desde solicitar la intervención del Consejero Jurídico de la Presidencia en el conflicto sindical hasta buscar nuevas oficinas ya estallada la huelga ignorando el impedimento legal para seguir operando contenido en el artículo 4º de la Ley Federal del Trabajo, o incluso, según testimonios, aquellos que solicitan a las empresas periodísticas y de noticias no contratar a ex trabajadores de la Agencia.

“La ética no es una característica de Sanjuana Martínez”, finaliza. •

Consulta los documentos firmados por Sanjuana Martínez

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